En Europa, el 77 % de la población vive actualmente en ciudades, así que surge la necesidad de nuevos modelos de producción que se adapten a contextos cada vez más urbanizados. La agricultura urbana ha ido desarrollando técnicas innovadoras en este ámbito para mejorar el abastecimiento de alimentos en las ciudades, minimizar la huella proveniente del transporte, crear ofertas laborales, reciclar residuos, crear cinturones verdes y fomentar la resiliencia frente al cambio climático.

Huerto urbano en La Victoria. ICAL – Diario de Valladolid

Food City Boost es una iniciativa innovadora financiada por el programa europeo Horizon y liderada por la Universidad Libre de Ámsterdam que pretende analizar el papel de la agricultura urbana para enfrentar el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la desigualdad social y la creciente desconexión entre los entornos urbano y rural, así como el impacto del uso insostenible de los recursos en los sistemas urbanos, al fin de informar el desarrollo de políticas alimentarias urbanas adecuadas.

En palabras del coordinador del proyecto, Pierre Chopin: «Los huertos urbanos, los cultivos en azoteas y verticales son sistemas agrícolas versátiles que se han convertido en parte integrante del sistema alimentario y de la vida de los ciudadanos europeos. Sin embargo, los numerosos beneficios que aportan y las formas en que las políticas pueden apoyar y orientar su desarrollo aún necesitan profundización y apoyo.»

 

El proyecto cuenta con la colaboración de 20 socios como la Fundación Entretantos, las Universidades de Barcelona, Riga (Letonia), Wroclaw (Polonia) y Lieja (Bélgica), la Agencia Estatal Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el Centro de Investigación del Paisaje Agrícola de Leibniz (ZALF) (Alemania) y otras entidades de 9 países, que trabajarán conjuntamente con múltiples partes interesadas para impulsar el desarrollo sostenible de la agricultura urbana y periurbana.

Encuentro de los miembros del consorcio en la Universidad Libre de Amsterdam

La Fundación Entretantos representa la ciudad de Valladolid y su Estrategia Alimentaria participando como uno de los 6 Living Labs (o Laboratorios Vivos), que son procesos de investigación colaborativa centrados en co-crear, prototipar y validar, en un contexto real, soluciones adecuadas a las necesidades de la sociedad y del territorio.

El consorcio tuvo su primera reunión física en la Universidad Libre de Amsterdam a principios de abril para definir los cimientos del proyecto y marcar el inicio de un viaje de colaboración de 4 años. En específico, se abordaron la identidad del proyecto, las estrategias de comunicación, la alineación con objetivos políticos, el desarrollo de análisis y evaluación de datos sociales, económicos y medioambientales, así como las tendencias futuras que influyen en las iniciativas europeas de agricultura urbana, el diseño participativo de sistemas innovadores y su impacto. A continuación, los representantes de cada Living Lab expusieron su historia, funciones y características. Esto dio lugar a una serie de sesiones para planificar acciones y metodologías y compartir necesidades y expectativas del proyecto.

Aunque el proyecto aún se encuentra en sus primeras etapas, ya está generando aprendizajes e intercambio de experiencias entre los socios, así como promoviendo una evaluación holística del potencial transformador de la agricultura urbana.

Para más información sobre FOODCITYBOOST se puede visitar su web, Instagram, Facebook, Twitter y seguir en las redes sociales de @AlimentaValladolid la evolución de actividades y propuestas que iremos haciendo desde la Estrategia Alimentaria de Valladolid.