Ayer estuvimos en el Grupo de Trabajo 22, en el CONAMA2012, que giraba en torno a Rio+20. Organizado por la Fundación CONAMA y ECODES, pudimos escuchar el relato de los representantes de varios sectores y su visión y experiencias sobre Rio+20, más allá de las noticias desalentadoras que hemos escuchado los que no estuvimos allí en Junio. Además, se presentó en España la iniciativa Unión Global por la Sostenibilidad (UGS), que seguramente dará mucho que hacer y que hablar en los próximos meses -y años, con un poco de suerte-.
Víctor Viñuales (@vinuales81), de ECODES, nos invitó a trascender la sensación de desesperanza y desolación a la que nos llevan tanto los resultados institucionales en Rio+20 como la situación actual en Europa, a resistir la tentación de ensimismarnos y a darnos cuenta de que, más allá de la decepción que nos transmiten responsables políticos y gobiernos, hay innumerables actores que están participando activamente en la construcción de cambios. Para contrarrestar la inercia y lentitud con que funcionan las cosas en el ámbito multilateral debido al cortoplacismo y los intereses de país, nos incitó a llorar lo justo, presionar a los líderes para que estén a la altura de sus responsabilidades, complementar el enfoque de derechos con que trabaja a menudo el tercer sector con el de corresponsabilidad y empujar la gobernanza mediante un movimiento de diplomacia cívica global.
Víctor Gutiérrez (@paleartico) nos comentó la intención de la Fundación Biodiversidad de seguir trabajando para reforzar dos de los pilares importantes en Rio+20, la economía verde – a través de empleaverde, emprendeverde y la creciente presencia de la dimensión económica en los programas de conservación de biodiversidad- y la gobernanza -potenciando y reforzando el trabajo en red de las organizaciones del tercer sector-.
Dos de los puntos fuertes de la tarde los pusieron José Luis Hernández, de COATO, que pertenece a la red local de Global Compact en España y ya ha asumido compromisos muy interesantes en el marco de UGS y Antonio García Allut, de la Fundación Lonxanet, que trabaja con pescadores apoyando, defendiendo y potenciando la pesca artesanal. Antonio nos contó, con total transparencia y sencillez, como una pequeña Fundación puede llegar a influir en el documento final de Río+20 y conseguir que la pesca sostenible se cuele en la agenda política multilateral. Una experiencia inspiradora sobre la forma de trabajar para la defensa de la cogestión de los bienes comunes antes de que estos sean privatizados del todo.
Las organizaciones no gubernamentales pusieron el énfasis lógico en la crítica a la cumbre oficial y el menosprecio con que los responsables políticos hacen de estos temas que deberían ser tan claves en la agenda. Celia Barbero, de la Fundación IPADE, insistió en la necesidad de defender los bienes comunes, de apostar por una economía cooperativa y solidaria –y no un mero lavado de cara como podría apuntarse en algunos enfoques de la economía verde- y de la soberanía alimentaria frente a la seguridad alimentaria. Además, coincidió con algunos otros asistentes en la fuerza que tiene la praxis, mucho más potente y contagiosa que los discursos.
La parte final de la sesión estuvo dedicada a la presentación en España de la Unión Global por la Sostenibilidad, una iniciativa nacida en Brasil de la mano de Ethos y que ahora está comenzando a extenderse por el resto del mundo. Oded Grajew y Henrique Lian (@hlianfuturity) la presentaron en un diálogo con Víctor Viñuales y Alicia Torrego (@Alicia_Torrego), como un intento ambicioso para responder a la lentitud del proceso multilateral gubernamental y para adquirir la fuerza política suficiente para inducir cambios en las reglas del juego. La UGS es una iniciativa abierta a todos los grupos de interés –públicos y privados, educativos, científicos, del tercer sector…- que solo excluye a los gobiernos nacionales porque éstos ya tienen sus propios foros de trabajo multilaterales. Está pensada para movilizar la sociedad a todos los niveles mediante compromisos de acción para la sostenibilidad y el trabajo en red y como un movimiento abierto a la cocreación colectiva, orientado a generar cambios de abajo a arriba. La red española de la UGS se abrirá en pocos meses de la mano de la Fundación CONAMA y ECODES, lo que sin duda será una buena noticia y el punto de partida para una nueva aventura que compartir. Estaremos atentos y lo iremos contando aquí.
En síntesis, y aunque el aforo no era muy nutrido en comparación con otras sesiones del CONAMA, el grupo nos aportó inspiración, ideas, ganas de trabajar y la sensación de contar con interesantes compañeros de viaje. Poco más se puede pedir.
Javier García _ fundación entretantos